En estos tiempos se debe verificar y analizar si se cuentan con los recursos suficientes para contratar personal o adquirir deudas. Se debe tener siempre un control de gastos sino de lo contrario se puede caer en una crisis económica
Es el momento ideal para hacer una revisión equiparando costos vs precios. Por eso se tiene que pensar en una manera de vender su producto más barato sin perder las propiedades de lo que se vende.
En casos de crisis las alianzas estratégicas con otras empresas o individuos interesados en lo que se hace puede ser una opción de ayuda, siempre tomando en cuenta que se debe mantener la idea de no entrar en decadencia.
Que los obstáculos no sean impedimento para seguir adelante. Adaptarse al sistema es fundamental para sobre salir, el apoyo efectivo y el desarrollo son parte de los métodos más eficientes para combatir las peores situaciones.
Estar en constante capacitación es primordial, con más razón aun cuando se está al borde de una crisis, tanto es así que han surgido muchos cursos gratuitos con certificados de participación, desde cursos básicos para el servicio al cliente o bien el uso de redes sociales para atraer clientes y minimizar la brecha tecnológica de las empresas que no hacían uso de ellas o no lo hacían de forma habitual
El mejor equipo de trabajo se evidencia en épocas como esta que estamos viviendo
Reconocer el trabajo de adaptación que hacen sus colaboradores es muy importante ya que ellos le van a retroalimentar de una forma fluida si usted cuida de ellos.
Trate de compensarlos no es necesario de forma monetaria ya que lo que se busca ahorrar, si no dando apoyo, acompañamiento escuchando los imprevistos que han surgido para mejorar, eso le permitirá estar a la vanguardia de lo que requieren sus clientes y como abarcarlos.
Las pequeñas y medianas empresas costarricenses han sido de las más afectadas en Costa Rica tras la pandemia causada por el COVID-19. Muchas han quebrado, muchos emprendedores quedaron con sus sueños rotos tras el cierre de sus locales; pero muchos siguen luchando.
Son muchos los negocios que se han visto reducidos a la impotencia tras ver sus ingresos al mínimo, sin un apoyo real del Gobierno y sin más remedio que intentar soportar los vientos de cambio o cerrar.